11 de marzo de 2014

Basado en hechos reales.

"–¿Dónde te metes? 
–¿A qué te refieres? 
–A que ya nunca estás donde solías estar.
–Ah ya, he dejado de ir.
–¿Por qué no me has avisado? 
–Por que quería estar sola."
  
Y una vez más huyo de las situaciones incómodas, una vez más dejo que la gente se vaya. Es más fácil escuchar música, pretender que no hay nada mal hecho ni equivocaciones. Pretender que no soy yo la que falla. Así poco a poco me he ganado lo que voy recogiendo, me merezco sentirme sola de verdad porque es lo que he estado pidiendo a gritos. Y lo único que quiero es alguien que pueda aguantar alguna de mis idas y esté para mis venidas. Quiero hablar con alguien e ir más allá de una mierda de "bien, ¿y tú?". Quiero sentir que cuando ya no me soporte a mi misma venga alguien y lo haga más llevadero. 

"–¿Has tenido un día malo o algo?
–Llevo semanas así."

De todas maneras me callo, sólo te lo cuento a ti que a saber por qué me lees. Quizás es miedo, poca confianza, inseguridad o un retraso monumental, pero lo único que puedo conseguir son malas caras, preocupación innecesaria o un "no te rayes". Y para eso, dejo que esto me pudra por dentro, porque total todos tenemos algo de mierda en el interior. 

"–¿Por qué te acuestas tan pronto? 
–Porque estoy cansada de estar despierta y de todo esto."

                       

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por tu comentario ♥