29 de mayo de 2018

go ahead and break my heart again.

Rómpeme el corazón. Una, dos veces. Hazlo otra vez. Cógeme y tírame al suelo, destrózame. Hazme pedazos por favor. Hazme sentir pequeña, redúceme a cenizas. Creerás que mi piel es de acero, que a lo mejor no escucho. Que no sé ver. Que no veo nada de lo que hay detrás.

Pero sí que lo veo.

Joder que si lo veo.

Otra cosa es que me pueda hacer la tonta. Que te de la oportunidad de disculparte, de tirar las armas al suelo. Aún sabiendo que no, no lo harás. Ni lo vas a pensar más de dos veces antes de disparar y me harás pedazos. Porque te doy igual, mi heridas, mis agujeros te la sudan. Escupes ácido, y no te quema nada, no ardes en llamas.

Y dentro de mí, mil incendios. Mil millones de inviernos.

Paso.
Rómpeme.


merci, merci, merci

26 de mayo de 2018

you could be in the Louvre

you stopped and I saw
you looked at me
i wondered how it could be
how could i draw
you

your lines so perfectly designed
like they were reunided
and decided this is what i'm missing.
this is how love feels

and touches,
goes and smells.

this is you and i'm following your lines
with no worry in my body
no regrets.

just you making art out of us.


merci, merci, merci

21 de mayo de 2018

get out of my head before i cave in.

la verdad me quema
la garganta, mis piernas
tiemblan, de miedo,
de frío.

por favor, vete
vete de mi cabeza
antes de que me rompa
en pedazos.

antes de que este techo
se caiga sobre mí
y nos ahoguemos
con el polvo.

a mí ya me cuesta
respirar, ignorarlo todo
no puedo correr la vista
a un lado.

noche y día te quedas
conmigo y no te vas
hasta que abro los ojos,
aún sigues ahí.

en mi cabeza
una y otra vez.
no te quiero aquí
vete, por favor.

vete antes de que la que acabe en ruinas sea yo.



merci, merci, merci

19 de mayo de 2018

¿cuántos zapatos necesito para quererme un poco más?

hay una insatisfacción
incesante que no para de buscarte
que confundes y mientras te hundes
en mares más grandes que tú,
no paras de nadar.

nadas y nadas,
y muchas más enredadas
en tu intestino delgado
en tu costado retorcido.
no sabes cuál es el problema
esperas, pero rellenas esa nada

por sin sentidos,
por ropa
por abrigos,
amigos sin serlo,
comida,
gimnasios,
y libros.

rellena lo que puedas
pero no veas
que solo eres una muñeca
un soldadito de plomo,
en una sala a oscuras
viendo tu vida pasar.

tienes tu cuarto
hasta arriba
olvidas que todo es mierda
que eso no es vida,
que faltan sonrisas y sinceridad contigo misma.
contigo mismo.
todos somos iguales.

tíralo, para qué
para qué todas las gorras,
los tatuajes, las cosas que cuelgas en la pared.
si no ves, no ves
lo que tienes delante de ti.

por qué tienen que completarte, si naciste con un punto y aparte
escrito bajo tus costillas.

merci, merci, merci

12 de mayo de 2018

Dime qué es peor, olvidar o ser el olvidado.

No se oía nada más que su respiración agitada y las agujas del reloj. Le miró y sonrió una vez, por los viejos tiempos. También lloró, por los buenos recuerdos que jamás volverían. El tacto de su mano, el olor de su piel después de una ducha. Se querían tanto que a veces llegaba a doler. Jugó con los dedos de sus manos y siguió recordando. Una noche cogieron el coche y huyeron de las luces de la ciudad. Buscaron las estrellas hasta dar con la oscuridad total y allí se quedaron. Quizás haya muchas formas de sentir amor, cada uno lo encuentra como puede. Ella en aquel momento sintió eso y más, sintió una sacudida de aire fresco de los pies a la cabeza, el frío ausente en sus abrazos, en sus besos. El universo entero frente a ellos. 

Siempre que se ve sola quiere volver. Y una fuerza ajena a ella le oprime el corazón hasta dejarla sin respiración, un peso cae sobre sus hombros. Ni el sol lo derrite, ni el viento se lo lleva. Se queda ahí un ratito y le hace creer que es así cómo debe sentirse la pérdida. Compraría flores, pero no servirían de mucho, todo se acaba marchitando, todos acabamos por irnos para siempre en algún momento. Ella intentará recordarlo mientras pueda, mientras esas estrellas la observen desde arriba. 

Él acaricia su pelo canoso, ella reprime todos esos océanos en su interior y se despide con dolor un domingo más. 

Puede que mañana él la olvide y sus lagunas acaben ahogándolos.



merci, merci, merci

4 de mayo de 2018

cómo procrastinar

Hay un charco frente a mi ventana, pero no consigo ahogarme en él. Y el sol se acerca a mis hombros pero no me calienta, solo me quema. Es como si corriera contra el viento y me hiciera menos fuerte. Abro la ventana y me pongo encima una manta, porque hace frío y me niego a cerrarla. Al menos oigo a la gente pasar, coches corriendo contra el asfalto, y el silencio de un muro blanco y húmedo. Quiero pensar que ya es verano, que por fin somos libres. El charco sigue ahí, creando goteras sobre las cabezas de otras personas que no soy yo, siendo que por dentro sigo podrida.

si eres imperfecto y sigues equivocándote, nadie tiende su mano con dulzura.

escucho a todo el mundo,
menos a mí misma.
y ellos no paran de hablar
mientras permanezco en silencio.
te hago caso, sigo tus pautas
y me llevan al caos,
a querer romper las palabras con mis puños.

sigo escuchándote,
¿pero quién me escucha a mí?
te conviertes en bruma,
y mis oídos ya no distinguen
lo que dices
de lo que gritan mis pulmones,
de lo que dicen los demás.

estoy llena de huecos vacíos
que buscan reconocimiento
que se esconden bajo mi piel.
como un poema, tras él
hay más que versos.
pero hablo para el cuello de mi camisa,
y ando con el alma desnuda.


merci, merci, merci