25 de octubre de 2013

Otra vez.

Contó el número de respiraciones dadas y trató calmarse de alguna manera. Él se acercaba cada vez más rápido, o eso le parecía a ella. ¿Qué pensaría cuando la viera después de tanto tiempo? ¿Se acordaría de ella o solo la vería como una chica más entre las que había allí? Entonces volvió para girarse a mirarle y poder capturar ese momento, ya que seguramente pasara mucho tiempo hasta que se volvieran a encontrar. Deseó que se diera cuenta de su presencia, que dijera que había cambiado mucho desde la última vez, y que se sintiera un estúpido por todo lo que ocurrió en el pasado. Quiso que la mirara de la misma manera que ella le miraba a él, que de alguna vez fuera en parte correspondida, aunque al segundo bajó la cabeza y fue consciente de la cantidad de gilipolleces que estaba diciendo. Tachó todas esas ideas de su cabeza y se centró en no volverse mientras él pasaba. Agradeció no estar andando, porque era probable que sus piernas la fallaran y se cayera al suelo al instante. ¿Cómo seguía teniendo el mismo efecto en ella? Imbécil, retrasado...