y es que a veces sonrío y al segundo me pongo a llorar. ni de felicidad, ni de tristeza. de impotencia por no saber qué hacer. porque nadie puede tomar esa decisión por mí. porque todos los días me levando con la misma duda y millones de posibilidades. adoraría poder decir que todo o nada. me encantaría poder mandarlo todo a la mierda e irme a vivir a Viena. te juro que a veces creo que esa es la única solución, que vuele tan lejos que la gente pase de buscarme.
joder por qué sonrío y al segundo me pongo a llorar. no tiene sentido. estoy loca. y todo me afecta demasiado. dejo que todas estas canciones me afecten más de lo necesario. pienso más de lo necesario cuando la solución siempre está delante de mí. pero le doy más vueltas y se difumina. me mareo y ya no puedo verlo todo tan claro. esque voy dando tumbos pero nunca acabo de caerme, nunca llego a estamparme, nunca me hago daño del todo. solo estoy aquí, colgando.
llorando, en un segundo sonriendo de nuevo.